Ya llega.....mi fiesta favorita casi está aquí! Halloween is coming!! Como ya sabéis adoro Halloween, los disfraces, las decoraciones, los dulces...todo!!! Y como no podía ser de otra manera....os traigo una receta especial para este día...terroríficos dedos de bruja!
Este año quería hacer una receta que realmente asustara y creo que lo he conseguido o bueno, al menos algo de grimilla si que dan...o eso dice mi madre, según ella están buenísimos pero le da "cosa" comerlos, así que...misión cumplida!
No son dedos de verdad, lo juro! son galletas!!
Y lo mejor de todo es que son muy muy muy fáciles de hacer.
Con los ingredientes que os pongo os saldrán unos 40 dedos de bruja. ¡Vamos con la receta!
Ingredientes
400 g de harina de repostería.
160 g de mantequilla sin sal a temperatura ambiente.
150 g de azúcar glas.
2 huevos.
1 cucharadita de esencia de vainilla.
Un poco de ralladura de piel de limón.
1 pizca de sal.
Almendras con piel.
Elaboración
En un bol mezclamos muy bien la mantequilla junto con el azúcar y después añadimos los huevos uno a uno. (Antes de echar los huevos apartamos un par de cucharadas de ka clara para luego poder pegar las almendras a la masa).
Una vez hemos mezclado todo bien añadimos la pizca de sal, la ralladura de limón y la esencia de vainilla y seguimos mezclando hasta tener una masa homogénea.
Por último, añadimos la harina poco apoco, integrándola bien.
Terminamos de amasar con las manos ya que en este punto con las varillas será difícil hacerlo.
Una vez tengamos la masa lista la envolvemos en papel film y la dejamos reposar en la nevera unos 15 minutos.
Pasado este tiempo podemos comenzar a hacer los dedos de bruja!
Tomamos porciones de masa del tamaño de una nuez y hacemos pequeños rollitos simulando los dedos.
Para hacer la "uña" pegamos con un poco de clara de huevo (la que habíamos apartado anteriormente) la almendra en uno de los extremos.
Por último, con un palillo o un cuchillo de plástico marcamos las arrugas de los dedos para darles más realismo.
Tened en cuenta que al hornear aumentan un poco de tamaño por lo que tendréis que hacer los dedos delgaditos.
Una vez los tenemos todos listos los ponemos sobre un papel de hornear y los metemos en la nevera unos 15 minutos para que se enfríen y no pierdan la forma al hornearse.
Precalentamos el horno a unos 170-180ºC, con calor por arriba y por abajo, y horneamos entre 8 y 13 minutos.
Es importante no perder de vista el horno ya que dependiendo de cada uno el tiempo puede variar.
Cuando veamos que comienzan a dorarse ligeramente los sacamos.
Los dejamos reposar 5 minutos en la bandeja y luego los pasamos a una bandeja de rejillas para que se terminen de enfriar.
Para la decoración
En una taza ponemos un par de cucharadas de mermelada de fresa o de frambuesa y le añadimos un poco de colorante en gel rojo y un poquito de colorante negro hasta conseguir un color lo más parecido a la sangre.
Con un pincel añadimos la mezcla en los dedos de galleta como más nos guste.
Truco: Como al hornear se me agrietaron un pelín las galletas aproveché esas grietas para ponerles la "sangre" y simular heridas en los dedos.
Puede parecer una receta difícil pero ya habéis visto que es muy sencilla y el resultado final es espectacular.
Seguro que sorprenderéis a todos si les plantáis delante un plato lleno de espeluznantes dedos de bruja.
Espero que os haya gustado la receta de hoy y que os animéis a prepararla para la noche de Halloween porque será susto asegurado!
¡Besos!
Realmente me impresionó comerlas. Pero están muy buenas. Atreveos a hacerlas
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